jueves, 2 de octubre de 2025

Concientización de la perdida y desperdicios de alimentos

 


    Por desgracia, la plaga de la pérdida y del desperdicio de alimentos es tan alarmante y funesta como la tragedia del hambre que tan cruelmente aflige a la humanidad. Cito estos dos dramas juntos porque los considero unidos por una única raíz de fondo: la cultura imperante que ha llevado a desnaturalizar el valor del alimento, reduciéndolo a mera mercancía de intercambio. A esto se añade la indiferencia general hacia las personas indigentes, tan palpable en la actual coyuntura, así como el escaso cuidado que se otorga a la creación, con las nocivas consecuencias que ello acarrea por doquier. Todas estas actitudes, que pueden considerarse enraizadas en el egoísmo humano, llevan por un lado a que muchos se desprendan irresponsable e inmoderadamente de bienes primarios y, por otro, a no indignarse viendo que todavía hay multitud de personas que no disponen de lo necesario para vivir. Un egoísmo que se traduce, además, en la vigente lógica del lucro que regula las relaciones sociales y en la explotación irracional y voraz de los recursos naturales.

    Todos debemos convencernos de la urgencia de un cambio radical de paradigma, porque ya no podemos limitarnos a leer la realidad en clave económica o de insaciable ganancia. La alimentación tiene un fundamento espiritual y su correcta gestión implica la necesidad de adoptar comportamientos éticos. Cuando hablamos de alimentos, debemos considerar el bien que más que cualquier otro asegura la satisfacción del derecho fundamental a la vida y base del digno sustento de cada persona. Por tanto, debe tratarse respetando la sacralidad que le es propia, derivada de la sacralidad primaria de cada persona, y que le es reconocida por muchas tradiciones, culturas y religiones.

    Recordémoslo siempre: la comida asegura la vida y nunca puede considerarse un problema. De hecho, es la existencia de cada persona la que sirve de propósito y estímulo para mejorar nuestro trabajo diario. Por lo tanto, no podemos continuar aludiendo al crecimiento de la población mundial como la causa de la incapacidad de la tierra para alimentar suficientemente a todos, porque en realidad la verdadera razón que subyace a la proliferación del hambre en el mundo está en la falta de una concreta voluntad política de redistribuir los bienes de la tierra, de manera que todos puedan disfrutar de lo que la naturaleza nos da, y en la deplorable destrucción de alimentos en función del beneficio económico.

    El despilfarro alimentario, una de las formas más graves de generar residuos, muestra asimismo un arrogante desprecio por todo lo que, en términos sociales y humanos, se halla tras la producción alimentaria. Tirar alimentos a la basura significa no valorar el sacrificio, el trabajo, los medios de transporte y los costes energéticos empleados para llevar a la mesa comida de calidad. Significa desdeñar a cuantos se esfuerzan cotidianamente en el sector agrícola, industrial y de servicios para proporcionar unos alimentos que, perdiéndose o acabando dilapidados, no alcanzaron su loable fin.

    ¿Cómo poner fin a la pérdida y al despilfarro de alimentos? Para lograr este noble objetivo es preciso invertir recursos financieros, aunar voluntades, pasar de las meras declaraciones a una toma de decisiones clarividentes e incisivas. Pero sobre todo es imprescindible afianzar en nosotros la convicción de que el alimento desechado es una afrenta para los pobres. Es el sentido de la justicia hacia los necesitados el que debe impulsar a todos y cada uno a un categórico cambio de mentalidad y de conducta. Esto se hace cada vez más apremiante, ya que hay que reconocer, y quisiera subrayarlo, que el alimento que arrojamos a la basura lo arrancamos inicuamente de las manos de quienes carecen del mismo. De aquellos que tienen derecho al pan de cada día en razón de su inviolable dignidad humana. San Pablo lo tenía claro cuando afirmaba que no se trata de aliviar a otros pasando estrecheces; se trata de igualar. La abundancia de unos ha de remediar la carencia de otros (cf. 2 Co 8,13-15). El desarrollo, por lo tanto, debe estar estrechamente relacionado con la sobriedad de vida. Forman un binomio inescindible.

    Es necesario, además, reavivar en nosotros la conciencia de nuestra pertenencia común a la única familia humana universal. El que se acuesta con el estómago vacío es nuestro hermano. Compartir con él lo que tenemos es tanto un imperativo de justicia como de aquella solidaridad fraterna que brota de las relaciones familiares. 

    Mientras pido a Dios que la familia de las Naciones vuelva a ser verdadera, vuelva a sentirse aquel espacio donde prevalezca la concordia, la generosidad y la ayuda recíproca y amorosa entre los hermanos, agradezco vivamente a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura todas las iniciativas y programas que lleva a cabo para poner fin a la pérdida y al despilfarro de alimentos. Que Dios Todopoderoso colme sus trabajos de copiosos dones celestiales para beneficio de toda la humanidad.

Vaticano, 29 de septiembre de 2023

Francisco

 Evidencias de la acción significativa de Septiembre  














ACCIONES SIGNIFICATIVAS PERMANENTE 










jueves, 26 de junio de 2025

"Que se curen las laceraciones causadas por las acciones sangrientas de los últimos días".

 


Por: Salvatore Cernuzio | Fuente: Vatican News

El Santo Padre, al concluir la Audiencia general, expresó su preocupación y esperanza por la situación entre Irán e Israel, deseando que se hagan esfuerzos para seguir "el camino del diálogo, la diplomacia y la paz": "Que se curen las laceraciones causadas por las acciones sangrientas de los últimos días".

El Papa León XIV vuelve a invocar a la paz en un Oriente Medio sumido ya en la división, la violencia y la “lógica de la arrogancia y de la venganza”, y sacudido también el domingo pasado por el “vil” atentado terrorista suicida en Damasco, Siria. Al final de la Audiencia general, antes de saludar a los fieles italianos, el Pontífice lanza su llamamiento por esta región del mundo que se presenta en forma de súplica. Un llamado a cuantos ocupan puestos de responsabilidad en esta tierra para que abracen el “camino del diálogo, de la diplomacia y de la paz”. El Papa León asegura que sigue la situación con "atención", pero también con "esperanza", a la luz del alto el fuego entre Irán e Israel - tras los ataques mutuos de los últimos días – que, desde muchos sectores, se espera que sea duradero y eficaz.

“Continuamos siguiendo con atención y esperanza la evolución de la situación en Irán, Israel y Palestina. Las palabras del profeta Isaías resuenan más urgentes que nunca: ninguna nación alzará más la espada contra ninguna nación, ni aprenderán más el arte de la guerra”.

Elegir el diálogo, la diplomacia y la paz

“Si escuchas esta voz que viene del Altísimo”, es la invitación del Papa, “se curaran las heridas causadas por las acciones sangrientas de los últimos días”.

“Se rechace toda lógica de arrogancia y de venganza y se elija con determinación el camino del diálogo, de la diplomacia y de la paz”.

Cercanía a los fieles en Siria

El Papa León no dejó de condenar el “vil ataque terrorista contra la comunidad greco-ortodoxa en la iglesia de Mar Elias, en Damasco”. Un suceso sangriento, como no se veía desde hacía tiempo en Siria, reivindicado por un grupo de Al Qaeda no perteneciente al ISIS sino formado por antiguos miembros de la coalición militar, que causó casi 30 muertos y más de 60 heridos. Un shock para el país producido en un contexto de guerra que muchos esperaban superado. Ayer, el Papa, a través de un telegrama firmado por el cardenal Secretario de Estado Vaticano Pietro Parolin, ya había expresado todo su dolor y enviado su solidaridad.

“Encomendamos las víctimas a la misericordia de Dios y elevamos nuestras oraciones por los heridos y sus familias. A los cristianos de Oriente Medio les digo: estoy cerca de ustedes, toda la Iglesia está cerca de ustedes”.

Renovado compromiso con la paz y la reconciliación

Este “trágico acontecimiento”, según León XIV, “recuerda la profunda fragilidad que aún afecta a Siria, después de años de conflicto e inestabilidad”. Por tanto, es esencial, para el Papa, que «la comunidad internacional no aparte la mirada de este país, sino que siga ofreciéndole su apoyo con gestos de solidaridad y con un renovado compromiso por la paz y la reconciliación».


Evidencias de las acciones Significativa del mes de Junio

con el lema: ¡Cuidar el medio ambiente, 

es responsabilidad de toda la gente!



Sector Sagrado Corazón de Jesús
Parroquia San Diego de Alcalá
en Xochimanca.


 



                                              Sector Asunción de María 
Parroquia San Diego de Alcalá
en Xochimanca 






Sector Virgen Reina de la Paz

Parroquia San Diego de Alcalá

Xochimanca.





                                      Sector San Francisco de Asís,

 comunidad Tequexquinahuac.



Rectoría Cristo Resucitado 

en el Xolache 

                   Compartimos algunos testimonios de la acción significativa 




Evidencias Acciones Significativas junio 



Comunidad de Santa Inés en La Parroquia de la Purificación de María



Sector 2 " Rafael Guízar y Valencia'". En la Parroquia de La Purificación de María



Parroquia de San Miguel Arcángel Tlaixpan

Compartimos la oración de abandono 

y los invitamos orar por la salud de: Jeremy Santiago Matías






 


Concientización de la perdida y desperdicios de alimentos

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